Titulo: Monsters
Género: Aventura, Fantasía, Romance.
Advertencias: Hasta ahorita ninguna.
Personajes: Ren, Jiro y May (Personajes Originales)
N° Capítulos: ¿?
Jiro creó un
trozo de hielo en su mano y corrió hacia el pelirrojo quien aun tenía los ojos
cerrados y lo apuñalo en el estomago con él, haciendo que este escupiera
sangre. El hielo desapareció al igual que la nieve y el clima volvió a la
normalidad en un segundo.
-¡Ren! –Grito
mientras atrapaba al pelirrojo -¡May ayúdame! –Dijo volteando a ver hacia donde
se encontraba ella momentos atrás pero no había nadie –Por favor despierta…
-Dijo llorando con el pelirrojo en sus brazos –Lo siento…
-Oye… ¿No
crees que te estás pasando? –Pregunto Ren a May, quienes se encontraban
observando la escena desde lejos.
-Solo te
ayudo a entrenarlo.
-Ya es
suficiente –Dijo para luego caminar hacia Jiro y May deshizo la ilusión que
había puesto sobre él.
-¿Ren? –Dijo
al ver que el pelirrojo ya no estaba en sus brazos.
-Estoy aquí
–Dijo haciendo que volteara, y rápidamente se levanto y corrió hacia él, Ren
pensó que iba a golpearlo por haberle hecho eso pero en lugar de eso recibió un
abrazo del más alto.
-Estas bien…
creí que… que te había matado –Dijo llorando en el hombro del pelirrojo.
-Todo está
bien –Dijo devolviendo el abrazo.
-¿Qué fue
eso?
-Es el poder
de la princesa, puede crear ilusiones –Dijo mientras se separaba de él.
-¿Por qué lo
hicieron? –Dijo limpiándose las lágrimas.
-Para saber
cual era tu otro poder –Hizo una pausa y continuo –Tengo una queja y una
disculpa ¿Cuál quieres escuchar primero? –Jiro lo miro un poco sorprendido.
-Mmm… la
disculpa.
-Siento
haberte llamado débil y patético pero tenía que hacerte enojar…
-Está bien ¿Y
la queja?
-¿Por qué no
me curaste? Me heriste y no me curaste…
-Lo siento…
creo que… entre en pánico.
-Recuerda que
eres el que cura en el equipo, sí alguien resulta herido debes curarlo
inmediatamente.
-Entendido…
pero… ¿Para qué era este entrenamiento exactamente?
-Bueno como
ya te diste cuenta tenemos dos poderes, el primero es fácil de usar, pero el
segundo es difícil, es más como un mecanismo de defensa, normalmente lo usamos
cuando estamos heridos o enojados, es un poco difícil pero podemos aprender a
usarlo aunque no estemos en peligro.
-¿Enserio?
-Sí, aunque
gasta mucha más energía.
-¿Los golpes
también eran una ilusión? –Dijo tocándose el cuerpo viendo que ya no le dolía.
-Sí ¿Quieres
volver a entrenar? –Jiro asintió –Pero esta vez será real –Dijo tomando un palo
igual que la vez anterior.
-¿Estás
seguro? No quiero herirte… -Dijo el más alto preocupado.
-¿Estas
bromeando? Quien dice que puedes herirme –Dijo en tono de burla.
-¡Hey! –El pelirrojo
corrió hacía él y lo ataco, Jiro lo esquivo.
-Trata de
congelar agua del ambiente para hacer un escudo de hielo donde lo necesites –Volvió
a atacarlo, esta vez en el brazo, Jiro creó un escudo de hielo en el pero era
muy delgado así que un así sintió el golpe.
-Muy bien,
más grueso la próxima –Dijo volviendo a atacarlo, el se cubrió con ambos brazos
y creó un escudo de hielo sobre ellos pero esta vez más grueso.
Volvió a
atacarlo y este volvió a defenderse con el escudo de hielo.
-Es hora
–Dijo haciéndole una seña a May y aparecieron muchos iguales a él, eran
alrededor de 10 quienes rodeaban a Jiro listos para atacar.
-Ren, eso no
es justo…
-Las batallas
no son justas –Volvió a atacarlo, ahora junto con sus ilusiones, y el trato de
defenderse como pudo –No te limites a defenderte, atácalos, son solo ilusiones.
Obedeciendo
las órdenes del pelirrojo, creo una daga de hielo y comenzó a atacarlos, cada
vez que le daba a uno desaparecía, estaba combinando muy bien el ataque con la
defensa, creaba escudos de hielo para defenderse y luego los atacaba. Cuando
por fin acabo con todos cayó de rodillas exhausto.
-¿Lo hice
bien? –El pelirrojo corrió hacia él.
-Lo hiciste
bien –Dijo mientras lo ayudaba a levantarse –Por cierto, mira esto –Dijo
mostrándole un pequeño espejo.
-Mi cabello…
-Su cabello antes azul ahora se encontraba de color café claro –Oh… mis ojos
también lucen diferentes –Dijo fijándose como sus ojos ahora lucían ligeramente
azules.
-Nuestro
cabello muestra nuestra energía, por eso cuando nos debilitamos cambia de
color, y nuestros ojos muestran nuestro poder, así que puedes saber que tan
fuerte es el poder de los demás solo viéndolo a los ojos.
-¿Entonces
volverán a la normalidad más tarde?
-Tu cabello
sí, pero tus ojos se volverán más azules entre más entrenes.
Volvieron al
hotel ya que Jiro se encontraba demasiado cansado por el entrenamiento.
Eran
alrededor de las 6 am, Jiro se encontraba frente al espejo mirando el nuevo
color de sus ojos.
-Ren –Dijo al
ver el reflejo del pelirrojo en el espejo -¿Qué haces aquí? –Pregunto dándose la
vuelta.
-Vine a ver
como estabas.
-Estoy bien…
pero aun me siento mal por herirte ayer –Dijo mirando al piso –Se que fue una
ilusión pero fue demasiado real.
-Yo… ¿Te
gusto? –Pregunto el pelirrojo de repente.
-¿Uh?
-Cuando te
quite la energía cerraste los ojos ¿Esperabas un beso? –Dijo mientras se
acercaba a él.
-Yo no… -El
pelirrojo se acerco su rostro al suyo y este volvió a cerrar los ojos.
-Quiero que
te alejes de el –Se escucho la voz de una chica, abrió los ojos y el pelirrojo
ya no se encontraba ahí, solo May quien se encontraba en la entrada de la
habitación.
-¿May? ¿De qué
hablas? –Dijo confundido.
-Sabía que te
gustaba desde ese día –Hizo una pausa y continuo –Pero ayer cuando lloraste así
por el fue demasiado –Dijo caminando hacia él.
-¿Por qué me
dices esto?
-Porque él es
mi prometido.
-¿Qué? ¿Desde
cuándo?
-Lo comenzaron
a entrenar cuando tenía 5 años para protegerme.
-Pero-
-¿Ya están despiertos?
–Pregunto el pelirrojo desde la puerta.
-Sí ¿Ya está
el desayuno? –Pregunto May.
-Está en la
cocina –Apenas dijo eso la pelirroja salió de la habitación –¿Estás bien?
-Estoy bien…
-Dijo caminando fuera del cuarto.
Jiro no dijo
ni una palabra durante el desayuno, aun no podía creer que Ren estuviera comprometido,
y no con cualquier persona sino con una princesa, una princesa cuyo poder podía
hacerle la vida imposible sin que él pudiera hacer algo para evitarlo.
Al terminar
el desayuno Ren se fue hacia su habitación y Jiro intento seguirlo para hablar
con él pero May lo detuvo.
-Te lo
advierto, aléjate de él –Hizo una pausa y continuo –No me obligues a hacerte
daño.
-May… yo se
que tu no harías algo así.
-¿Estás
seguro? Luego no esperes que sea piadosa contigo –Dijo para luego caminar hacia
la habitación del pelirrojo.
-Creo que lo
mejor será irme… -Dijo para sí mismo una vez que la pelirroja se había ido.
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Hace mas de una semana que no actualizo @_@ Pasaron varias cosas, como mi teclado que dejo de funcionar bien, y tuve que comprar uno nuevo, ademas acabo de retomar mis clases de japones esta semana (y aun no hago la tarea ;_;)
No quede completamente satisfecha con este capitulo, quizás lo edite un poco después.
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